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Amenazan, golpean y días después intimidan a reportero en Zitácuaro

  • Date: Jul 12 2020 Time: 12:00
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    El 12 de julio, el periodista Armando Linares fue golpeado y amenazado por elementos de la Fiscalía General del Estado de Michoacán. Los hechos se registraron cuando el comunicador cubría el presunto homicidio de una mujer en La Tenencia de San Felipe de los Alzati, en Zitácuaro, Michoacán. En el lugar los agentes Ministeriales amenazaron y después agredieron físicamente al reportero quien cortó la transmisión cuando fue golpeado. Un elemento con un arma larga se acercó a donde Armando realizaba su trabajo y le reclamó el que tomara con el teléfono de su cámara las actuaciones de peritos y el trabajo de los policías ministeriales. Como se puede apreciar en la propia transmisión en vivo que Armando Linares realizaba por Facebook, procuró no entrar en confrontación con el elemento, sólo le preguntó que qué procedía. El elemento le acusó de poner en riesgo a sus compañeros policías, porque en las tomas aparecían sus rostros. Linares explicó que era imposible no realizar tomas de los uniformados, toda vez que era una transmisión en vivo y ellos se encontraban en la escena del crimen. Sin embargo, el oficial comenzó a alzar la voz y a reclamar. Armando reiteraba la pregunta: ¿Qué procede, entonces? Después de un rato, el uniformado se retiró, pero regresó con otro y, violentamente, procedieron a forcejear con el reportero, a fin de despojarlo de su equipo. Mientras tanto, le decían que fuera “hombrecito” y que tuviera “huevos”. El reportero fue retenido en el lugar, mientras que su teléfono celular y su equipo fue destruido. Fue gracias a la intervención en ese momento del asesor legal Joel Vera, como se evitó que Armando fuera trasladado en calidad de detenido. Se le dejó ir; sin embargo, la agresión y la obstrucción de su trabajo sigue impune; además, está el tema de la reposición de su equipo de trabajo que fue destruido por los elementos policíacos. En un video que circula por redes sociales se observa cómo el reportero respeta en todo momento el protocolo de seguridad en la zona del crimen, siendo ese el argumento principal que motivó la agresión de los elementos. Días después de esta agresión, el 22 de julio, el comunicador fue acusado de extorsión por la FGE.